*** Muy Cercano el Ministro Aguilar a Felipe Calderón
Por Marco PRUNEDA / The UNIVERSE News / EL UNIVERSO.
Ciudad de México.- El ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Luis María Aguilar Morales es quien busca declarar como inconstitucional la consulta para enjuiciar a los expresidentes.
Porque de acuerdo con Aguilar, los derechos humanos reconocidos en la Constitución y por tratados internacionales deben de ser protegidos.
Pues esos derechos “puedan ser políticamente incómodos o socialmente cuestionables y no pueden restringirse, ni siquiera si la mayoría de las personas que voten en una consulta popular lo estimaran así”.
Aguilar Morales llegó a la SCJN el 1 de diciembre del 2009, postulado por el presidente Felipe Calderón, uno de los mandatarios que la ciudadanía pide enjuiciar, además de Vicente Fox, Ernesto Zedillo, Enrique Peña Nieto y Carlos Salinas.
Aguilar abordó en 43 páginas cada uno de los puntos que el presidente López Obrador presentó como sustento para enjuiciar a los ex presidentes.De acuerdo con el ministro la inconstitucionalidad del proyecto se fincó en el artículo 35 constitucional.
Dicho artículo señala: “no podrán ser objeto de consulta popular la restricción de los derechos humanos reconocidos por esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado mexicano sea parte, ni las garantías para su protección”.
Conforme a Aguilar la propuesta de consulta popular contiene múltiples violaciones constitucionales. En uno de los puntos para oponerse a la consulta, es comparar la impartición de justicia con la esclavitud.
Pone como ejemplo el preguntar si el pueblo mexicano está a favor o no en permitir la esclavitud. Ya que señala que esas cuestiones no son consultables.
Adelantó que en caso de llevarse la consulta y el resultado determine que se enjuicie a los ex presidentes, se ordenará a las autoridades competentes a no cumplir sus obligaciones de investigar, perseguir y sancionar los delitos.
Esto aun, cuando en el futuro aparezcan pruebas que hicieran presumir su responsabilidad de los acusados.